Contigo en la cama

lunes, 12 de mayo de 2008
Como el cielo y el mar somos
Como la luna y el sol fuimos
Enredadera sobre mi espalda serás
Maceta vacía soy para ti
Venus en la madrugada eres para mí
Calienta mis pies en esta húmeda noche y fingiré ser tu amante todo el día
Ventana abierta a mi campo floreado, nube negra apúrate pa llegar, mójame y vete antes que te abrace nuevamente

Mirar

Un ave fénix cayendo por el firmamento, grito perturbante, que nadie voltee. Cae como cae la noche lenta y silenciosa. Muerte, dolor. Derrame de sangre, edificios cubiertos con esta sangre, dulce y fresca. Ojos negros, jarras huecas, sin sentimientos, llenas de este aire sofocante, como tú. Un punto lejano camina junto a su otro compañero. Mi mano eterna quiere alcanzar tu ala rota. Fascinación.

Sombras...tu y ella en una ceremonia hostil. Apaga las velas corazón, nadie te verá hoy. Nadie te ama ni lo hará. Cuerpo celeste, cuerpos rojos, maldito seas por querer ser más que mi sol en mi sistema corporal. Las persianas burlescas, se agitan y critican este acto mediocre. Yo solo puedo ver este combate de cuerpos que van oscilando entre los abismos de tu piel, vicioso orgasmo. No extingas esta composición pictórica perfecta.