Cuando comer Fruta

domingo, 27 de septiembre de 2009
La fruta es un alimento muy rico en vitaminas y minerales, de bajo aporte calórico y con un porcentaje de agua que oscila entre un 80 y un 95%. Es pobre en proteínas y nula en grasas (excepto el aguacate).


Se aconseja consumir de 3-4 piezas de fruta al día, de las cuales, al menos 1 debe ser un cítrico (aporte de vitamina C). Si se consumen en forma de zumos, habrá de hacerse recién exprimidas para evitar la pérdida de vitaminas por la acción de la luz.

No está claro cuando es mejor comer la fruta.

Algunos expertos recomiendan comerla antes de las comidas para evitar así posibles dificultades digestivas consecuencia de la fermentación de los azúcares. Asimismo señalan que la fruta posee ciertas sustancias ácidas que estimulan las secreciones del estómago lo que facilitaría la digestión.

Existen dos frutas, la piña y la papaya que parece que facilitan la digestión de las proteínas si se consumen al mismo tiempo que otros alimentos.
Pero no hay que olvidar que la fruta aporta las mismas calorías se coma antes o después de las comidas. En algunas dietas de adelgazamiento recomiendan comerla primero por el efecto saciante que producen y evitar así la posterior ingesta de grandes cantidades en la comida.

Asimismo, comer la fruta de postre evita la ingestión de otro tipo de alimentos (dulces, etc) que poseen mayor valor calórico y contenido en grasas. También es bueno como postre porque los ácidos que contienen ayudan a realizar una limpieza de la boca.

Las necesidades energéticas de cada individuo van variando a lo largo de su vida, y dependen de multitud de factores; edad, sexo, actividad física.... Lo importante para no engordar es mantener siempre un equilibrio entre las calorías ingeridas y las gastadas.


¿Cuanta fruta es necesaria?

Por la mañana:

  • 1 vaso de 250grs. de jugo de naranja exprimido en vez de café, té, o mate.
  • 1 taza de queso cottage con pedacitos de manzana, ananá o banana (peras mejor no, porque tienen demasiado azúcar y además se ponen demasiado negras y blandas enseguida).
  • Una manzana (sin pelar) para comer camino a la oficina, o a la facultad.

Al mediodía :

Asegurarse de comer también una ensalada de frutas, y no... no es cosa de mujeres!

A media tarde:

  • Tomar algún jugo de frutas o leche Ades, o Soy Más, o licuado con agua y sin agregarle azúcar extra.
  • En caso de desesperación por algo dulce, recurrir a las pasas de uva, rubias y sin semillas. Hacen milagros y son fáciles de llevar en el portafolio o en el bolsillo porque no se aplastan y tampoco manchan.
  • No te asustes de llevar una manzana a la reunión de trabajo. Puede ser que seas el único, pero pronto tendrás compañía…

En la comida de la noche:

Podés comenzar la comida con un pomelo cortado al medio con una cucharada de té de azúcar negra. También se puede poner en el microondas o en el horno y comer caliente. Es rico y no tenés que saber cocinar.

Uno de los beneficios....


Los supuestos beneficios para la salud que otorga el consumo de té verde son amplios: ayudaría a combatir la diabetes tipo 1, el acné y a prevenir patologías cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.


Un nuevo estudio realizado en Japón concluyó que hay una nueva razón para tomar té verde, esta vez las más beneficiadas serían las mujeres. En dicha investigación, las japonesas que tomaban más de cinco tazas al día de este té, tuvieron un 20% menos de probabilidades que los hombres en desarrollar el cáncer de estómago.

Los científicos han estudiado el té verde en relación con la prevención del cáncer debido a su característica de antioxidante, la cual ayudaría a proteger a la persona contra esta enfermedad. En particular, se cree que el este tipo de té tiene un compuesto que combatiría las bacterias relacionadas al cáncer de estómago.


El 20% de la reducción de riesgo de esta enfermedad en mujeres que tomaban 5 tazas o más, en comparación a quienes tomaban 1 o ninguna, se mantuvo incluso después de que los investigadores relacionaran la enfermedad con el consumo de tabaco. Sin embargo, explican que la disminución del riesgo sólo se aplica cuando el cáncer afecta ciertas partes específicas del estómago.


Ellos mismos advierten que el estudio no prueba una relación causa efecto y que es necesario averiguar si realmente el té tiene esta propiedad.

¿Guardar un secreto puede ser un peso?

sábado, 19 de septiembre de 2009

Exactamente 47 horas y 15 minutos. Ese parece ser el tiempo máximo en que las mujeres pueden guardar un secreto, según una encuesta de Wines Chile Inglaterra, realizado a 3 mil mujeres inglesas de entre 18 y 65 años, de donde se dedujo que cuatro de cada diez simplemente son incapaces de mantener un secreto, independiente de cuán personal fuera.

A pesar de esto, nueve de diez de las encuestadas se definió como “confiable”, porque al momento de revelar un secreto éstas lo hacían con personas ajenas a los hechos confesados o de diferente grupo social al de los implicados en el secreto. Es más, el 40% confesó que considera aceptable contarle un secreto a una amiga que no conozca a la persona implicada. Entre los temas más comunes están los asuntos íntimos, el costo real de las compras y los romances.

Al parecer, contar un secreto produce cierta sensación de alivio. El estudio determinó además que un tercio de las mujeres sienten la “urgencia” de contar el rumor o secreto, y de éstas, cerca de la mitad lo hizo sólo para sacarse el peso de encima.

Sin embargo, la encuesta también da cuenta de que existe un grupo importante de mujeres (27%) que olvida las confidencias que le cuentan al día siguiente.

Hacer ejercicio es bueno...

jueves, 10 de septiembre de 2009

Un nuevo estudio realizado en Estados Unidos, reveló que el beneficio de la actividad física en las personas dependería del género y la etnia.

La investigación incluyó datos de más de 15.000 hombres y mujeres afroamericanos y caucásicos de mediana edad, que participaban desde fines de los 80 en el ensayo llamado Atherosclerosis Risk in Communities Study.

Según publica Journal of Lipid Research, las personas que hacían una hora de ejercicio leve por semana o media hora de actividad moderada tenían niveles más altos de colesterol HDL, saludable para el corazón.

En el estudio, el "ejercicio leve" incluyó actividades como caminar por placer, jugar a bowling o levantar pesas. El "ejercicio moderado" fue una actividad más intensa, como el básquetbol, caminar por la montaña o la danza moderna.

ESTUDIO


El equipo, dirigido por Keri Monda, de la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill (EEUU), encontró también que hacer más ejercicio tendía a reducir significativamente los triglicéridos, pero sólo en los caucásicos.

Otros estudios habían identificado esos mismos efectos positivos del ejercicio sobre el colesterol HDL y los triglicéridos.

Pero este equipo descubrió que el aumento de la actividad física reducía en las mujeres, pero no en los hombres, el colesterol LDL, que obstruye las arterias. Los autores observaron también que el ejercicio agregado bajaba los niveles de colesterol total, pero sólo en las mujeres negras.

Esas variaciones en las respuestas fisiológicas "en su mayoría" son nuevas.

DIFERENCIAS


¿Qué hay detrás? El equipo no está seguro, pero opina que las diferencias hormonales entre hombres y mujeres, además de las diferencias genéticas entre etnias, explican por lo menos una parte de esos resultados.

El equipo admite también que algunos datos de los participantes se obtuvieron mediante un cuestionario y que, aunque es una técnica estandarizada para los estudios de largo plazo, no garantiza un 100% de precisión en la información.

De todos modos, señaló el equipo, el estudio aporta nueva evidencia del efecto positivo del ejercicio sobre el colesterol HDL y los triglicéridos.

"Los resultados destacan la importancia de la actividad física sobre el perfil de lípidos de la sangre", escribieron los autores.

VIAJE A LA LUNA

miércoles, 9 de septiembre de 2009
En muchos blogs y sitios pseudocientíficos se sostiene que en realidad el hombre nunca piso la Luna. Según los defensores de esta teoría conspirativa, las imágenes que la NASA mostró del viaje del Apolo corresponden a un montaje, y que el hombre nunca desembarcó sobre el satélite.

Hace casi 40 años, el 20 de julio de 1969, el astronauta norteamericano Neil Armstrong, frente a una audiencia estimada de mil millones de televidentes daba si pequeño paso, con el pie izquierdo, y se paraba sobre la polvorienta superficie de la Luna. La luz del Sol, sin una atmosfera que la difuminase, daba un brillo extraño a la escena. En ese momento comenzaba una nueva era para el hombre, y una nueva leyenda urbana.

Es que no son pocos los que hoy piensan que todo se trato de un montaje. De hecho, según una encuesta encargada por la NASA, el 11% de los norteamericanos cree que en realidad el “alunizaje” se filmo en el desierto de Nevada, a solo 150 kilómetros de Las Vegas. La teoría del engaño, apoyada entre otros por los polémicos autores Bill Kaysing, Ralph René o Bart Winfield Sibrel, afirma que se monto un estudio de televisión en el desierto, y desde allí se trasmitieron las imágenes que el resto del mundo creyó provenían del Mar de la Tranquilidad, en la Luna.

El objeto de dicho engaño habría sido cumplir, a cualquier precio, la promesa que, en plena guerra fría, había hecho el presidente Kennedy al Congreso de Estados Unidos. Kennedy se comprometía a situar un hombre en la Luna y devolverlo sano y salvo a la Tierra antes del fin de la década del sesenta. Esa era su respuesta al Sputnik ruso. Además, no debemos olvidar que en 1969 la Guerra de Vietnam se encontraba en pleno apogeo, por lo que un alunizaje constituiría una distracción muy conveniente para un gobierno que tenía en haber más de 50.000 muertos en una guerra cuyo sentido no estaba demasiado claro.

Bill Kaysing, uno de los más férreos defensores de la teoría de la conspiración, trabajó entre 1956 y 1963 como redactor técnico en las misiones Apolo. "Durante este tiempo la NASA realizó un estudio de viabilidad que indicó que sólo tenían un 0,0017% de posibilidades de situar un hombre en la Luna y de devolverlo luego a Tierra.", dice Kaysing-, y asegura que es imposible que para 1969 hubiesen alcanzo un éxito del 100%.

En realidad, la tecnología utilizada por el Apolo 11 era muy primitiva comparada con los estándares actuales, y según algunos, este hecho da la razón a Kaysing. El ordenador de a bordo tenía menos memoria que una lavadora moderna.

Entre las objeciones que plantean los partidarios de la teoría conspirativa se encuentra la ausencia de estrellas en las fotos tomadas en la Luna por los tripulantes de las diversas misiones Apolo. De hecho, la cuestión tiene cierta lógica: el cielo de la Luna es límpido, y no hay atmosfera que entorpezca la visión del espacio, así que ¿dónde están las estrellas?

La respuesta a esa pregunta es bastante simple: las estrellas están ahí, solo que no podemos verlas. Se trata de objetos cuyo brillo es demasiado tenue para aparecer sobre la fotografía. En realidad, para sacar la foto de un astronauta vestido con un traje blanco sobre el fondo negro del espacio hay que ajustar la cámara de forma que el tiempo de exposición sea lo suficientemente pequeño para semejante contraste. Las estrellas simplemente no alcanzan a registrarse sobre la película.

A algunos le resulta extraño a ninguno de los astronautas se le ocurriese hacer una instantánea con un tiempo de exposición suficiente para capturar el firmamento tachonado de estrellas. La cámara Hasselblad con película Ektachrome de 160 ASA hubiese podido tomar una esplendida foto del cielo. Los escépticos argumentan que tal foto no se tomo por ese cielo hubiese sido imposible de reproducir sin despertar las sospechas de los astrónomos.

Una empresa de publicidad llamada The Viral Factory publicó un vídeo en internet (el año 2002) que cuestionaba el alunizaje del Apolo. En él se veía como uno de los astronautas (Neil Armstrong) abandona el Apolo 11 para pisar el suelo lunar. En ese mismo instante uno de los focos de la escenografía se caía. Se veía como de inmediato ingresaban al set una serie de técnicos para arreglar el desperfecto y seguir con la grabación. Para rematar, de fondo se escuchaba la supuesta comunicación de los astronautas con el centro de control de misión.

Este video fue presentado en sitio www.moontruth.com , y puedes verlo aquí.


Escapismo

domingo, 6 de septiembre de 2009

La empecinada Bella está enamorada de un vampiro. Zoey tiene una media luna marcada en la frente que le dejó un pequeño chupasangre. Ever, de 16 años, puede oír los pensamientos ajenos. Calíope es, a regañadientes, la hija de la Muerte.

Todas son personajes de heroínas modernas escritos por mujeres, leídos por mujeres y no sólo objeto de la obsesión de adolescentes, sino también de sus hermanas mayores y sus madres. Puede que la economía esté profundamente deprimida, pero las novelas de fantasías urbanas sobre vampiros, zombies, criaturas sobrenaturales, sangre y romance están floreciendo, y las mujeres les están hincando los dientes con una voracidad insaciable.

"Estamos viviendo una época temible. Quién sabe si es un escapismo para controlar las cosas que nos asustan por medio de la lectura", comentó Amy Clarke, disertante en la Universidad de California, en Davis, que enseña literatura de ciencia ficción.


Puede como fué en otras épocas donde la crisis también golpeaba duro a las grandes ciudades y países claves donde métodos como este mencionado anteriormente fueron parte del distractor para que la sociedad no se deprimiera y entrara en un estado "utópico"...como por ejemplo de superman u otros distractores igual de poderosos , salidos justo después de una crisis.

Ahi uds juzguen

La extraña fascinación por las conspiraciones

El año era 1991 y la escena musical se remecía por el lanzamiento del disco Nevermind, el nuevo trabajo de Nirvana. Su vocalista Kurt Cobain se convertía en un ídolo por canciones como Territorial Pissings, donde el estribillo más famoso era: "Sólo porque eres paranoico, no quiere decir que no te estén persiguiendo". Un lema para todas las personas que ven complots gubernamentales en cada esquina o que creen con fe ciega en que una figura como Elvis sigue viva.

El mismo Cobain no escapó de estos amantes de las conspiraciones al morir en 1994. Tras conocerse el parte policial que hablaba de un suicidio con un escopetazo en la cabeza, de inmediato surgieron teorías alternativas, como la que hablaba de un asesinato por parte de la esposa.

¿Por qué las personas creen en complots que parecen influir en todo tipo de aspectos cotidianos pero que también suelen ser muy improbables? Michael Shermer, sicólogo y profesor de Economía de la U. Claremont Graduate de EE.UU., ha dedicado años a explicar por qué tras cuatro décadas aún hay gente que cree que el viaje a la Luna del Apollo 11 fue un sofisticado montaje de la Nasa.

Complot máximo

Uno de los factores es la tendencia humana a hallar patrones significativos en todo lo que lo rodea: "Consideremos aquel supuesto rostro esculpido que existe en la superficie de Marte o la imagen de la Virgen María que aparece de tanto en tanto en un pan tostado. Por supuesto que algunos patrones son reales y hallarlos en el clima y en la migración de los animales fue vital para la supervivencia de los homínidos del paleolítico".

El problema, añade Shermer, es que no desarrollamos "un dispositivo para discriminar entre los patrones reales y los falsos", por lo que tendemos a pensar que todos tienen algo de cierto. De hecho, un estudio del sicólogo Bruce Hood, de la U. de Bristol (Reino Unido) y autor del libro SuperSentido, mostró, por ejemplo, que los niños creen que el Sol puede pensar y seguirlos y por eso añaden rostros felices a los dibujos que hacen del astro.

Los datos de Hood también indican que los adultos rechazan usar una polera con la imagen de un asesino en serie, porque creen que el "mal" es una fuerza sobrenatural que infunde esa aura a quien la usa. De la misma forma, un tercio de los trasplantados cree que la personalidad del donante se traspasa con el órgano. "Mucha gente educada e inteligente tiene una poderosa sensación de que hay fuerzas que manejan el mundo; eso no se basa en alguna evidencia concreta. La sensación de que pueden ser reales forman una especie de supersentido que moldea intuiciones y supersticiones", dice Hood.

Rasgos personales

A estos factores se suma la propensión de mucha gente a hallar evidencia que confirme lo que ya cree, además de encajar las sucesivas explicaciones de un hecho a lo que ya sabemos que ocurrió. Así, dice Shermer, se establecen las bases del pensamient0 conspirativo.

Ejemplos de este proceso aparecen en Cultos, conspiraciones y sociedades secretas, libro del periodista Arthur Goldwag. "Cuando algo extraordinario pasa, todo lo que lleva a ese hecho y lo que se desprende de él también parece crucial", dice Goldwag, aludiendo al asesinato de JFK. "Con lo que sabemos hoy, las filmaciones del atentado parecen repletas de enigmas, desde el rostro expectante de los espectadores a las sombras. Cada alteración extraña parece sospechosa e incita a plantear teorías en torno a ella", dice Goldwag.